martes, 21 de julio de 2009
Política 3.0 ¿Dos digitos para el pueblo?
miércoles, 27 de mayo de 2009
10 tuiteos por dia
Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.Basta.
¡Ya no aguanto mas a los charlatanes digitales!
El editor de Perfil digital Darío Gallo, que no es Julián, desde su blog afirma que el twitter mejora la escritura de los nuevos periodistas. Para el que no conoce, Twitter es una especie de red social tan grande como facebook, en donde los usuarios postean tweets, textos de no más de 140 caracteres, para comunicarse o contar que están haciendo en ese momento. También hay quienes lo denominan microblogs.
Darío pone como ejemplo de como deberían ser escritas las noticias, una breve historia contada por un usuario llamado hiloglorieta.
El texto extraído de su twitter dice así:
También hay otro más que es destacado por ser "información de interés público, siempre imprescindible para quienes siguen la hilarante realidad nacional."
Para deleite intelectual de Darío ,el usuario de twitter juliagutierrez escribe:
Darío, como es generoso, en el final de su post nos da un consejo a los estudiantes de periodismo:
"La falta de síntesis y la claridad de concepto en pocas palabras sigue siendo uno de los déficit de la mayoría que sale de las escuelas de periodismo. Tal vez si comenzaran a trajinar Twitter, a unos diez tuiteos por día como mínimo, aumentarán la capacidad para redondear conceptos en copetes y epígrafes. Si vas a criticar o elogiar este post, sólo podés hacerlo en 140 caracteres."
Para el "profe", el déficit mas importante de los nóveles periodistas no es la falta de rigurosidad, el no saber manejar fuentes confiables, el no escribir bien, el no ser tendencioso...
El problema es no ser breve para nuestros pobres lectores que cada vez leen menos.¡Que buenos consejos nos da a los estudiantes de periodismo este ladero del ex procesista y ahora democráta Jorge Fontevecchia!
Yo, Paulito, como hago mis deberes y quiero ser parte de los medios sea como sea*, le escribí un tweet al Gallo que no es Julián, en 140 carácteres como dios digital manda.
Dice así:
No olviden tomar su desayuno y escribir los 10 tuiteos mínimos de cada día
viernes, 1 de mayo de 2009
¿Quieres ser Julián Gallo?
Una nueva dieta mutante
Julián Gallo expresó en TEA que el periodismo tradicional suele tener mal acostumbrados a sus lectores. Comparó, utilizando una metáfora culinaria, las distintas secciones en que un diario se suele dividir con una dieta reducida, que simplificaría la realidad. “Yo no quiero milanesas con papas fritas todos los días”, dijo. “¿En qué sección pongo una noticia sobre sexo? ¿En salud?”, especificó. Ver menú de clarín.com acá.
El periodismo digital, según el consultor, está ampliando la dieta del lector al utilizar nuevos recursos (twitter, videos, etc) y al permitir, potencialmente, la existencia de una sección para cada cosa. En resumen, se trata de una de las promesas de Internet en general: infinitas ofertas para infinitas demandas, el límite es el usuario. Se trata, también, de una de las promesas del capitalismo y de la democracia liberal, que se suelen fundir con el mandamiento que reza “Se tu mismo”. Y justamente, según Gallo, otra de las virtudes del periodismo digital es la de permitir al lector elegir con precisión qué tipo de notas leer. “¡A mí no me importa el clima de Tucumán! ¡A mí no me importa que haya niebla en la autopista que va a Ezeiza!”, dijo, exaltado. Gallo quiere ser siempre “él mismo” y que las noticias lo mantengan en esa igualdad, en su isla de la libertad. En el blog Mirá, consecuente, ejercita su autonomía inventando secciones cada vez más singulares. Una de ellas se titula “Declaraciones delirantes” y se puede ver acá. Por un lado, la declaración atribuida a D´Elía que dio origen a la categoría es falsa. Basta con entrar al link este para corroborarlo. Por el otro, la frase es claramente política y se deforma encasillándola en “delirante”. Pero esto es resultado de su manera de hacer periodismo… y política
Sembrar y recolectarGallo es, así, un periodista que no produce información, que no chequea detenidamente sus fuentes y que no se detiene a pensar las palabras con las que se comunica. Pero como consultor da cátedra y vende bien, claro. En una época en la que ser polémico es positivo porque llamar la atención, atrapar al consumidor, factura. En tiempos en los que debemos mutar porque Dios es digital. Y, entonces, muchos quieren ser Julián Gallo.
Juan Pablo Aznarez
jueves, 30 de abril de 2009
Cacarear de más
Julián Gallo, experto en Nuevos Medios, que esto bien podría llamarse Nuevos Medios Digitales Argentinos o Impulsemos Así
Gallo es, acaso, el alma mater, genio creador, padrino del mundo web-digital periodístico argentino, creador de Clarín.com y fuerte impulsor del periodismo blog, etcétera. Pero, creo, él mismo no es un exponente de buen periodismo: él no es fuente de noticia, sino un curioso que navega por día sus ciento y pico de medios digitales y, cuando encuentra una perla –según sus parámetros, claro–, la cuelga, con una pequeña síntesis, YouTube incluído, tags, etiquetas, pim bum bam, post. Esto no está mal. Solo es que habría que chequear de qué se habla cuando se habla de lo nuevo. La forma del paquete, sea papel, sea digital, mediante YouTube o lo que fuere, no es lo importante, sino el fondo, la información, el contenido de lo que tenemos ahí al frente. ¡Y, si todos somos Gallo, se acaba el periodismo! Espero que las reglas de Gallo sobre la fotografía periodística no se impongan en el Futuro, porque, además de que lo tendríamos que bancar panzón y calvo parlando acerca de este “movimiento” (“Cuando empezamos, éramos pocos...”), todo sería un poco más trucho. No habría posibilidad de un futuro Robert Capa, un Henri Cartier Bresson. De fotografías del tal magnitud. En la guerra, el periodista y el fotógrafo laburan en sintonía, informan a través de distintos sentidos. Así es posible que, sobre lo que ocurre en
Sebastián Alarcón
Alumno, repita, es revolucionario............................ R-E-V-O-L-U-C-I-O-N-A-R-I-O
En la imágen se puede apreciar al lider revolucionario Julián Gallo agitando a las masas de estudiantes, periodistas cool y directivos de multimedios, reunidos en un aula de la Universidad de Palermo.
El bloggerchevique los guia para que se apropien de los medios interactivos, realicen la revolución 2.0 y logren digitalizar las redacciones.
Mientras tanto, el nefasto régimen de los sindicatos y gremios periodisticos se prepara para confundir al pueblo trabajador de prensa, preso de las garras de la burocracia y sumido en el atraso de los diarios papel.
¿Hay alguna razón por la cual las patronales les deberian pagar a los primitivos fotógrafos profesionales por el trabajo que bien puede hacer un niño de cinco años?
A flexiblizar, a flexibilizar, que las redacciones no son nuestras, tuya o de aqu...
Paulo se retracta
Jaqueado ante la falta de elementos para rebatir su magistral defensa del buen nombre del consultor de medios interactivos, procedo a pedir disculpas y retractarme públicamente. (otra vez!)
Sin dudas, la he pifiado feo. Gallo y su sequito de divulgadores 2.0 son los revolucionarios del siglo XXI.
miércoles, 29 de abril de 2009
Una milanesa sin pan rayado
"Para que una cosa sea interesante basta con mirarla durante mucho tiempo. Ese es el slogan del blog de Julián Gallo y el mandamiento que siguieron las empresas periodísticas durante los últimos veinte años". Como bien comenta Alejandro Martín en el post anterior los que le pagan a Gallo por una consultoría saben lo que hacen. Siguiendo el consejo de gallo, Nazarena Velez pasó de ser la novia de un exitoso bailantero a gran personalidad de la farándula, Tinelli llenó la pantalla televisiva de la tarde- y en todos los canales- con el análisis de los bailarines amateurs de sus concursos y así consiguió liderar el ráting nocturno o los noticieros, comenzaron a repetir sin cesar hechos delictivos y nos convencieron de que vivimos en un lugar inseguro aunque, en rigor
"Una foto la puede sacar un chico de 5 años", desafió Gallo al auditorio de TEA - Entre el slogan y esta frase puede comprenderse lo que pretende del periodismo.
Gallo quiere que los periodistas se transformen en reproductores, como si fuesen DVDs. Ni en la charla ni en su blog demostró interés por los contenidos. Nunca habló de un periodista como un hombre encargado de interpretar la realidad.
O de por lo menos cuestionarla.
Por otra parte Gallo, quien no aparenta tener interés en defender los diarios de papel, propuso que los redactores saquen las fotos que ilustran sus notas, las editen y las corrijan. Una idea que sólo puede proponer una persona que nunca pisó una redacción o sumamente ególatra que cree que puede hacer el trabajo de todos.
El periodismo es un trabajo en equipo, no unipersonal. Se necesita que cada individuo cumpla con su función, que los fotógrafos que se especializan en sacar fotos y las sacan mucho mejor que un chico de 5 años, - y aparte tienen una cámara que un chico de 5 años no tendría fuerza para cargar en su hombro- , saquen fotos, que el redactor consiga todos los datos necesarios, escriba la nota y la entregue a cierto horario, que el editor la revise y analicé por ejemplo que no se repitan las palabras entre los distintos títulos y notas y que los correctores, - de los que Clarín y Olé han decidido prescindir desde hace ya varios años generando consecuencias nefastas para el lenguaje- corrijan. Las existencias de estos seres en una redacción no son un capricho. Gallo no justificó este desmedro por el trabajo de los periodistas. Especialmente de los fotógrafos que hacen periodismo, que todos los días corren tras la noticia.
Pablo Bruetman
martes, 28 de abril de 2009
Bla,bla,bla 2.0
Antes de enumerar mis argumentos quiero que quede en claro que no estoy en contra de los blogs ni soy un fobico a la tecnologia.
Pero si me parecen perversos los profetas como Gallo, que no es el único, que se la pasan llenándose la boca con afirmaciones tales como que el periodismo tradicional está muerto, que ahora la onda no es chequear fuentes porque alcanza con Wikipedia, que todo estudiante debería tener un blog, que hay que adornar la noticia con todo el arsenal multimedia posible y que promueve la flexibilización laboral de los trabajadores de prensa.
Gallo para explicar su tesis, utiliza entretenidas metáforas gastronomicas acompañadas de diapositivas, posee un buen conocimiento de técnicas de marketing y lo confieso, es un buen showman. No cuestiono eso.
Critico lo que hay detrás, el toyotismo rancio que emana su discurso.
Porque no solo estamos discutiendo acerca de si la noticia del diario online tiene que tener imágenes de Flickr, videos de Youtube, espacio para dejar comentarios y cuanto gadget se pueda agregar. Gallo está definiendo el perfil del trabajador de prensa del futuro, un pobre diablo que va a cobrar el mismo salario por hacer el trabajo de un camarógrafo, fotógrafo y editor de imágenes. Todos los roles en una misma persona, una ganga.
Ah, y blog, porque ahora el periodismo está en la onda Blogger. Y Twitter también, porque sus usuarios también quieren la noticia. Aaaah, y en algun futuro no muy lejano, también redactar algunas notitas para Blackberries y teléfonos celulares.
Pero dejémonos de jorobar un poco, esto no revoluciona el periodismo un pepino, solo nos hace cada vez más dependientes de la tecnología . Hay miles de cosas que pueden hacernos mejores periodistas antes que armarnos un blog o sacarle fotos a Obama con un celular.
Paulo Alonso
Lo que viene, lo que viene...
miércoles, 22 de abril de 2009
Las repeticiones de las puertas acuáticas
Es muy difícil que se vuelva a repetir un caso similar al Watergate en Estados Unidos o cualquier otro país de occidente.
No es que haya una escasez de gargantas profundas o periodistas dedicados como Carl Bernstein y Bob Woodward; todo lo contrario.
Uno de los problemas es que actualmente los medios de comunicación bombardean con noticias al receptor de una manera tan despiadada, que este pierde capacidad de comprensión y con el pasar del tiempo, la capacidad de hacer algo para cambiar el orden de las cosas.
Un escándalo por lavado de dinero al día siguiente es reemplazado en la agenda mediática por un piquete en una ruta, que a su vez será reemplazado horas después por una marcha de vecinos de Caballito reclamando por mas seguridad.
El argentino promedio nunca entendió mucho de que se trataba Skanska y luego quedó en el olvido por el caso de las valijas de Antonini Wilson, por ejemplo. Pero a pesar de esto, sigue consumiendo noticias sin cesar, teme quedar aislado del mundo.
Mientras cada vez es mayor la cantidad de noticias, el espacio para el análisis se va haciendo cada vez más pequeño. Tan pequeño que la empresa periodística decide darle al receptor la noticia ya analizada según su conveniencia y sin ahondar en detalles.
Se suele escuchar en boca de periodistas que “el periodismo de investigación no se ejerce, por falta de tiempo”. Debería decirse, que no se toman muchos trabajos de investigación, porque se supone una pérdida de tiempo. Muchos casos que fueron llevados a la justicia no han quedado en nada y en el mejor de los casos, solo ha servido para bajarle algunos puntos de imagen positiva al político de turno. Citando al periodista del diario
Bien gracias, aún el ex presidente Carlos Saúl Menem fantasea con un tercer mandato mientras se pasea de juzgado en juzgado negándose a declarar acerca de delitos que se le imputan y que el periodismo progresista le descubrió durante los años 90.
Aún queda por ver si los blogs y los medios digitales alternativos, no las versiones online de los grandes diarios, tomaran la posta en la ardua tarea de investigar lo que no es público o si se estancan en el amateurismo del llamado periodismo ciudadano.
Alonso - Bruetman 2011
Si los conoces, los botas